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Tecnología y Comercio: Una Historia que Evoluciona

Hace 61 años, un negocio visionario como “El Corte Inglés” ofrecía un sistema de reserva que permitía a sus clientes comprar desde casa y recoger sus productos en la tienda cuando estuvieran disponibles. Un ejemplo temprano de cómo la tecnología, incluso la analógica, ya comenzaba a fusionarse con el comercio físico para mejorar la experiencia de compra.

Hoy, el reto sigue siendo el mismo: Satisfacer las necesidades reales de los clientes, aprovechando las herramientas tecnológicas de la época.

No hay nada nuevo bajo el sol, pero sí formas más ágiles y eficientes de hacerlo.

¡El Futuro es Ahora!

Los consumidores han cambiado, y con ellos, la forma de hacer negocios. Cada día:

  • Cargan menos efectivo, prefiriendo pagar con terminales portátiles.

  • Realizan pagos en puntos de venta más accesibles, lejos de las sucursales tradicionales.

  • Confían más en los neobancos, como NU o Klar, para gestionar su dinero.

  • Optan por planes de prepago, abandonando las suscripciones mensuales.

  • Buscan agilidad y conveniencia en cada transacción.

El temor a lo digital ya no es una opción.

El Desafío: Transformar la Experiencia de Compra

La clave para cualquier negocio minorista es ofrecer una experiencia de compra positiva y consistente en todas las etapas. Adaptarse al cambio no es solo una cuestión de supervivencia, sino de prosperar en un mundo cada vez más digital y cómodo. 

¡La tecnología es nuestro aliado! En lugar de resistirla, integremos las herramientas digitales que nuestros clientes ya aman. Así, no solo nos mantenemos relevantes, sino que también creamos una experiencia de compra inolvidable.

Afrontemos el cambio y demos la bienvenida al futuro de nuestro negocio.